sábado, 16 de febrero de 2013

Semana Sylvia Plath. Poesía





En esta tercera entrada de la “Semana Sylvia Plath” nos vamos a encargar de su aspecto lírico y es que no podemos olvidar que donde realmente destacó Sylvia es en la poesía. Analizaremos en primer lugar la corriente en la que se inserta a la autora, después daremos algunas notas sobre la poesía inglesa y finalmente analizaremos un poco sus obras.

La poesía confesional

La poesía confesional, también denominada en algunas ocasiones poesía sucia, es una corriente poetica que surgió en Estados Unidos en la década de los 50 y 60. Es una poesía muy personal o del “yo”. El contenido de los poemas es eminentemente autobiográfico y se encuentra marcado por suponer una introducción profunda en una serie de materias que eran consideradas tabú en la época, como las enfermedades mentales, la sexualidad o el suicidio. Por lo tanto, supuso toda una innovación temática en la poesía de la época, muy polémica también por otra parte. El aspecto psicológico se acentúa de una manera particular en algunos de los autores como Anne Sexton, que comenzó a escribir esta poesía a propuesta de su terapeuta.

Está asociada con poetas como Robert Lowell, Sylvia Plath, Anne Sexton o W.D. Snodgrass. Precisamente podemos considerar a Lowell y su obra “Life Studies” como la precursora de esta corriente. Plath y Sexton eran discípulas de Lowell y es evidente la influencia de su obra en los trabajos de las dos (en el caso de Sylvia Plath particularmente acentuado en “El Coloso”). La mayoría de estos autores tuvieron una vida bastante atormentada.

La línea iniciada por la poesía confesional ha ejercido una influencia crucial en las generaciones posteriores, influencia que continúa hoy día. Podemos citar a Marie Howe y Sharon Olds, dos poetas contemporáneas cuyos trabajos enlazan de una manera clara con sus experiencias personales.

Apuntes breves sobre la poesía en inglés

Antes de entrar en la obra de Sylvia Plath creo que es necesario dar algunas notas acerca de la poesía anglosajona desde un punto de vista formal, es decir, sobre la rima y la métrica.

En inglés, como en español, dos palabras riman si tienen cierta identidad de sonidos, aunque en este caso, partiendo únicamente de la vocal acentuada e incluyendo tanto vocales como consonantes (por ejemplo, sing y sting o hop y top). Dos versos riman si sus dos últimas palabras riman. Hasta aquí lo sabemos todos y podemos identificarlo claramente con nuestra poesía en español, aunque evidentemente se pierde al traducir. Sin embargo la particularidad de la poesía en inglés estriba en que en muchísimas ocasiones la rima es interna, de manera que en estos casos, por muy buena voluntad que ponga el traductor, es imposible de percibir en la traducción. Además debemos tener en cuenta que la lengua inglesa no se presta como el español (o el francés o italiano) a la rima, dada la abundancia de consonantes en el último lugar de la palabra. Juan A. Prieto Pablos en su libro “Guía básica para estudiantes de literatura inglesa” afirma que “no es casual que la mejor poesía dramática se haya escrito sin rima alguna”. El ritmo tiende a obtenerse de otro modo, alternando la acentuación de las sílabas, generalmente una acentuada y otra no, pero hay también muchos otras estructuras de acentuación de los versos que dan lugar a diferentes ritmos.

En cuanto a la métrica, también tenemos alguna particularidad. Los poetas en lengua inglesa no suelen ceñirse a la métrica, es decir, no más que frecuentes las irregularidades en las estrofas. Ello se debe a las características del idioma, ya que si se respetaran las estrofas establecidas en muchas ocasiones daría lugar a un efecto demasiado repetitivo sin demasiado interés. 

Es muy frecuente por otra parte que los versos no terminen sino que continúen en el siguiente, lo que se denomina encabalgamiento. Sylvia Plath utiliza este recurso constantemente. Aunque claro, desde nuestra perspectiva hispanohablante y desde nuestra cultura poética, el efecto a veces es raro.

Todas estas características se plasman de una manera clara en la poesía de Sylvia Plath. Su rima es muy ligera, prácticamente inapreciable para nuestro oído. Muchas veces la consigue a través de la repetición de una serie de sonidos, como el sonido agudo “u” en el poema Daddy. En sus poemas encontramos una gran variedad de estructuras métricas, desde aquellas con versos más breves hasta los más largos.

La poesía de Sylvia Plath

Es cierto que a primera vista su obra poética puede resultar un tanto compleja. Las rimas no son evidentes y en muchas ocasiones no entendemos de qué habla, porque utiliza las palabras de un modo muy personal. Muchas de sus vivencias personales y cuestiones de su día a día están reflejadas en sus poemas (desde la visita a una morgue hasta su operación de apendicitis) pero aparecen “transmutadas” a una realidad lírica y es muy difícil identificar y comprender el significado último del poema. Ayudan mucho las notas que acompañan a los poemas, para que podamos ubicarlos temporalmente y también relacionarlos con alguna experiencia personal  (más abajo os muestro las ediciones que yo tengo, que os recomiendo). Si se conoce el momento vital en el que se encontraba el poema adquiere significado.

La poesía de Sylvia Plath está llena de imágenes, esta es precisamente para mí su principal cualidad. Es una poesía muy plástica, aunque requiere una profunda interpretación. Por otra parte está repleta de símbolos que tienden a repetirse, como el negro, el blanco (como ausencia de color) y la luna representan la muerte, así  como las flores, el rojo o los animales manchados representan la pasión.

Sus obras

El Coloso
El Coloso fue publicado el 31 de octubre de 1960.  En estos primero poemas Sylvia Plath aún estaba buscando su propio estilo, aunque ya es evidente que nos encontramos ante una poeta muy dotada por la precisión con la que maneja el idioma, su amplitud de vocabulario y su sensibilidad para los ritmos sutiles de su lengua. En él encontramos un claro predominio de referencias naturales (tanto reales como mitológicas), así encontramos descripciones de la luna, sangre, hospitales o fetos.  Sin embargo, ella acabó renegando en cierto modo de estos poemas diciendo que le “aburrían”. En cuanto al nombre hace referencia a su padre, que falleció cuando ella sólo contaba con nueve años. Este hecho le afectó de una manera crucial y la figura paterna sobrevuela en muchos de sus versos (en particular en Daddy, incluido en Ariel).

Ariel
Portada de la primera edición
Ariel se publicó el 11 de marzo de 1965. La primera publicación de Ariel no respetaba el orden de los poemas que había marcado Sylvia Plath. Al fallecer, Ted Hughes, todavía su marido a pesar de que se habían separado, se encargó de la edición de su obra alterando completamente el orden que ella había establecido en su proyecto.  En posteriores ediciones dicha anomalía ha sido rectificada o, por lo menos, señalada para que el lector lo tenga en cuenta. En la edición española de Hiperión analizan esta cuestión claramente.  El título se refiere a un caballo al que Sylvia montaba en la escuela de equitación.

Esta obra es la más importante de Sylvia Plath. En los poemas incluidos dentro de ella la autora vuelca la rabia, desesperación, amor y odio que siente (acababa de ser abandonada por su marido y además se acentuaban sus problemas psiquiátricos). Son poemas de una intensidad excepcional, que han encumbrado a Sylvia Plath como un clásico contemporáneo de las letras estadounidenses.

Es aquí donde se incluye su conocidísimo poema Daddy, Papi, aunque personalmente no es de mis preferidos, es cierto que es muy representativo. En él Sylvia Plath escenifica la necesidad de librarse de su pasado para alcanza su propio yo, y para ello tiene que “matar”  la memoria de su padre que le oprime (el zapato negro representa aquí a su padre). En el vídeo Sylvia Plath lee el poema.

             You do not do, you do not do                                     Ya no, ya no
                  Any more, black shoe                                Ya no me sirves, zapato negro
            In which I have lived like a foot                        En el cual he vivido como un pie
            For thirty years, poor and white                    Durante treinta años, pobre y blanca
          Barely daring to breathe or Achoo           Sin atreverme apenas a respirar o a hacer "achís"

             Daddy, I have had to kill you                                Papi, he tenido que matarte
           You died before I had time… […]             Te moriste antes de que me diera tiempo... [...]



La muerte también tiene cabida en estos poemas. El poema Edge (Filo) fue el último que escribió poco días antes de su muerte y parece una despedida. Como ejemplo de su tratamiento de la muerte, os pongo unos versos del poema Lady Lazarus (Señora Lázaro)

                         […]Dying                                                                 [...]Morir                                      
              Is an art, like everything else.                                      Es un arte, como todo
                I do it exceptionally well.                                Y yo lo hago excepcionalmente bien

                I do it so it feels like hell.                                      Tan bien, que parece un infierno
                   I do it so it feels real.                                          Tan bien, que parece de veras
           I guess you could say I’ve a call […]                 Supongo que cabría hablar de vocación [...]


Cruzando el océano
Esta obra fue publicada en 1971, pero con importantes diferencias en la edición británica y en la estadounidense. El título hace evoca un cambio de orilla y aunque podría referirse a su traslado al Reino Unido en este caso los críticos piensan el cambio que sufre la poesía de Sylvia Plath, siendo una especie de “puente” entre “El Coloso” y “Ariel. De hecho la mayoría de los poemas incluidos en él fueron compuestos en 1960 y 1961. En esta obra encontramos poemas acerca de su perfeccionismo como Mirror (Espejo), sobre los primeros desencantos del amor, como en Love Letter (Carta de amor) o también sobre la muerte, como en Last words (Últimas palabras), poema este último muy estremecedor. Os destaco unos versos de I am vertical (Soy vertical), que claramente muestra lo poco que estaba enraizada Sylvia Plath a la vida. Queda patente el tránsito en esta obra utilizando todavía las imágenes de la naturaleza, y al mismo tiempo profundizando en la temática.

                           I am vertical                                                                   Soy vertical
            But I would rather be horizontal.                                      Pero preferiría ser horizontal
        I am not a tree with my root in the soil                             No soy un árbol con hondas raíces
        Sucking up minerals and motherly love                     En tierra sorbiendo minerales y amor materno
       So that each March I may gleam into leaf,                      Refloreciendo así de marzo en marzo
          Nor am I the beauty of a garden bed                         Tampoco tengo la belleza de un parterre
     Attracting my share of Ahs and spectaculary painted    Blanco de admirativos gritos, muy repintado
                Unkowing I must soon unpetal.                          Ignorando que pronto perderá sus pétalos
          Compared with me, a tree is immortal                       Comparado conmigo el árbol es inmortal
     And a flower-head not tall, but more startling,                           Y las flores son más audaces
           And I want the one’s longevity and the                    Y yo querría la edad de uno y las temeridad 
                                                 other's dating [...]                                                           de las otras [...]

Winter trees – Árboles de invierno
Con Árboles de invierno sucede algo semejante a lo que ocurrió con Cruzando el océano, puesto que aparece de manera diferente a cada lado del Atlántico en 1971 y 1972. En la edición británica se incluyeron poemas no incluidos en Ariel, mientras que la estadounidense incluye poemas que no se incluyeron en su versión de Cruzando el océano. En cualquier caso, todos los poemas fueron compuestos en 1962 o 1963.Si uno compara el orden que Sylvia Plath ideó para Ariel con estos volúmenes, nos podemos hacer una idea de cómo habría quedado un libro con sus últimos poemas.
Normalmente se incluye en la edición el poema a tres voces Three Women (Tres mujeres), que da más consistencia al libro y permite ver la variedad de voces y estilos de la autora

Ediciones españolas de su poesía

Actualmente para acercarse a la obra poética de Sylvia Plath en nuestro país contamos con los siguientes volúmenes:


Antología. Edición y traducción de Jesús Pardo. Lo edita Visor de Poesía. En esta antología encontramos los poemas más representativos de El Coloso, Cruzando el océano, Árboles de Invierno y Tres mujeres. Tiene una muy buena introducción con la biografía de la autora y algunos apuntes sobre la poesía en su aspecto formal. Muchos de los poemas tienen por otra parte una pequeña explicación al final para poder comprenderlos mejor.



Ariel. Edición y traducción de Ramón Buenaventura. Lo publica Hiperión. Aquí encontramos íntegra la obra maestra de Sylvia Plath. En el inicio encontramos una explicación sobre la composición de la obra (es decir, los poemas que se han incluido), así como un cuadro cronológico. En esta edición todos los poemas tienen una explicación al final en la que se especifica la fecha de composición y algunas notas biográficas para poder entenderlo de una forma adecuada


Yo tengo estos dos y os los recomiendo. Me parece un modo de tener una visión conjunta de su obra poética. Además está publicada su Poesía completa por Bartleby, pero de esta edición no os puedo hablar porque no la tengo (y en realidad ni siquiera la he visto en las librerías, aunque sale disponible sin problemas en las tiendas online).Sé que Hiperión también tiene publicada Árboles de invierno.

Conclusión
La poesía de Sylvia Plath puede parecer compleja. Es verdad que su disfrute requiere un poco de trabajo para poder comprenderla en su totalidad, pero a mi gusto, merece la pena. Es una poesía de muchísima intensidad, que una vez descubres, te llega muy dentro. Sylvia Plath es un personaje fascinante y su poesía no lo es menos

También, en la semana “Sylvia Plath”

11 comentarios:

  1. La poesía no es lo mío. No la entiendo y no la saco partido.

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    1. A mí también me cuesta a veces entenderla. No pasa nada, hay montones de novelas buenísimas :)

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  2. Me gusta la poesía, aunque no sé si la complejidad de la q hablas me gustará.jeje. Gracias por darme a conocer a esta autora desconocida para mí!!!jeje
    Saludos

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    1. Bueno, es cuestión de probar. Digo compleja porque no sé como definirla si no. Tienes que saber cómo estaba en ese momento y por lo que estaba pasando para que muchos de los poemas cobren sentido. Si le das una oportunidad puede que te guste
      Besos

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  3. Lo siento pero la poesía no me gusta. No consigo entenderla!
    Besos!

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    1. Nada, a quedarse con la prosa, que hay muchísimas cosas estupendas que leer :) Yo tampoco me prodigo mucho con la poesía, la verdad
      Besos

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  4. No he leído nada de esta autora. Aprovecharé tu "semana" para ponerme al día sobre ella.
    Abrazo!

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  5. A mi me gusta mucho Plath,aunque la que más me gusta es Anne Sexton.
    Por cierto la poesía no es todo entenderla,otra cosa es que no te guste o no puedas mirar a la poesía como se merece,es decir,hay que tener algo dentro,si no,nada.


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  6. Para mi estas dos escritoras (Plath y Sexton) han sido un descubrimiento tardío y fantástico. De hecho hoy son mis únicas amigas. Un abrazo!

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  7. Excelente artículo, si un poco más hubiera retrasado su muerte hubiéramos tenido más cosas de esta gran poeta... Aunque se una poco más, o al menos un poco más de reconocimiento en vida...

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Gracias por comentar